La Mancomunidad Integral Sierra Suroeste ha comenzado y asignado los servicios profesionales del Programa de Respiro Familiar 2025, una ambiciosa actuación social financiada por la Secretaría General de Servicios Sociales de la Junta de Extremadura, en el marco del Programa de Colaboración Económica Municipal (PCEM).
Esta iniciativa está dirigida a personas cuidadoras no profesionales, es decir, familiares o convivientes que atienden de forma habitual y continuada a personas con dependencia o discapacidad, sin una relación laboral o profesional. El programa se desarrolla en los siete municipios de menos de 4.000 habitantes de la comarca, donde la Mancomunidad gestiona directamente los Servicios Sociales.
El programa va a atender a más de quince familias beneficiarias directas, a las que se les han asignado apoyos personalizados, previamente negociados y diseñados junto a las trabajadoras sociales de la Mancomunidad. En total, está prevista la realización de alrededor de 800 intervenciones y servicios de respiro hasta los meses de septiembre y octubre de 2025, periodo en el que se prevé agotar la totalidad de los fondos que la Junta de Extremadura ha destinado específicamente a esta entidad mancomunada.
“Queremos cuidar a quienes cuidan. Este programa reconoce y apoya el esfuerzo silencioso de cientos de personas que sostienen, día a día, el bienestar de sus seres queridos sin recursos ni descanso”, ha declarado el presidente de la Mancomunidad, Abel Caro Díaz, quien ha querido agradecer a la Junta de Extremadura la puesta en marcha de esta valiosa iniciativa, y ha destacado especialmente la implicación del personal técnico y de los Servicios Sociales de la entidad mancomunada, cuya labor ha sido esencial para la planificación y ejecución del programa.
Servicios personales y apoyos incluidos
El programa contempla una variada cartera de servicios gratuitos, que incluyen:
– Atención domiciliaria puntual y acompañamiento por personal cualificado.
– Estancias temporales en centros sociosanitarios acreditados.
– Actividades de ocio, conciliación y tiempo libre en entornos no sociosanitarios (playas, campamentos, etc.).
– Acompañamiento en salidas puntuales, como consultas médicas o gestiones personales.
Estos servicios permiten a las personas cuidadoras disponer de tiempo de descanso, conciliación o resolución de urgencias, garantizando al mismo tiempo el cuidado y bienestar de la persona dependiente a su cargo.
Requisitos y acceso al programa de respiro
Para haber accedido al programa y beneficiarse del mismo, las familias participantes han debido cumplir una serie de requisitos esenciales. En concreto, las personas atendidas han debido de contar con los siguientes requisitos:
– Reconocimiento de dependencia en grado I, II o III y una discapacidad igual o superior al 33%, o
– Una discapacidad reconocida igual o superior al 75%, aunque no tengan valorada la situación de dependencia.
Además, ha sido necesario contactar con los Servicios Sociales de Base del municipio correspondiente, donde el equipo profesional ha valorado cada situación particular y, en su caso, ha propuesto su inclusión en la programación del servicio de respiro familiar.